miércoles, 21 de noviembre de 2012

Capítulo Vlll

•UNA VEZ AL AÑO NO HACE DAÑO•

Creo que después de ese mes ya me estoy liberando de Isabella por completo, aunque no llevo una mala relación amistosa con ella. En ocasiones nos vemos y platicamos. Que guapa se ha puesto la condenada.
Volví a tener mi puesto como humilde contador. ¿Saben? No me arrepiento de haber tomado esa decisión: la estoy pasando bastante bien. Hay menos estrés, menos cargas, menos juntas para mí, etcétera. Bien, muy bien la llevo.

Subo al avión. Todo está perfecto.
Excepto por una llamada que me haría Tom cuando ya estuviera en el avión. Algo hizo el cabrón: me instinto me lo dice.
Las azafatas no han dejado de verme y cuchichean en mis narices. ¿Tengo algo? Digo, me ven todas tontas, sin ofenderlas. Mientras no me pase como la otra vez: una chica se me aventó y besó cuando salía del baño de un avión mientras me dirigía a Rusia. Jamás olvidaré esa experiencia: fue algo bochornosa.
Tom me había comprado un boleto de avión para Hawai: una bella isla. Esa tenía un toque misterioso que me causaba muchas sensaciones. Tiempo llevaba en no visitarla.

"Que bonitas son las chicas de Hawai".

-Pasajeros con destino a Baja Calfornia sur, México: favor de abrohcarse su cinturón, por favor -dijo la vocera.

 "¿Qué? ¿Dijo Baja Ca..? ¿Qué? Seguramente se equivocó", pensé.
Comencé a mirar todo a mi alrededor e intenté salir, pero de inmediato me dijoe: "no armes un escándalo, soquete".
Una de las azafatas que pasaba por ahí dando diversas instrucciones estaba también resolviendo dududas, así que le pregunté:

-A donde dijo que ibamos, señorita? -inquirí.
-Baja California Sur, México -contestó.
-Ah, ok. Gracias -sonreí forzadamente.

La mandíbula me temblaba. Creo que hasta rojo me puse del coraje: ¡idiota seas, Tom! Me mintió el putón.
Maldita sea. Yo no quería ete destino.

-¿¡Quúe mierdas hiciste, Tom!? ¿Cómo que iré a México? -grité por el teléfono.
-Ey, ey. Una vez al año no hace daño, marica: ¿qué tanto te afecta ir a México?
-Me caga: me caga su gente tan mediocre. Eso es. Te odio, vendido cabrón -dije rabiado.
-Disfruta tus vacaciones, hermanito. Mamá te extrañará en estas dos semanas. Adióoos -dijo burlón y colgó.
-Muérete, puto.

Menuda mierda. ¿Y ahora qué? Yo no sé nada de ese país: ni sé a que hora llegaré allá. Maldita sea, tendré que improvisar. Jamás me había echo eso Tom.
Venga, venga. Hay que tranquilizarse: no debo parecer un imbécil RABIADO PORQUE SU HERMANO LE VIÓ LA CARA DE PENDEJO. Nada malo puede pasar, ¿o sí? No, no. debo tener una actitud positiva :-D.
Lo único que recuerdo y que ni lo tomé en cuenta fue:
"aparenta que tú eres un ciudadano de ahí: ahorita la inseguridad se está poniendo fuerte"
Yo pensando que era Hawai del que hablaba, hasta le contesté: "ajá, sí". Imbécil.

-Hola, amigo -me dijo una niña.
-¿Hola? -le dije. Que niña tan mona: su cabello largo y su flequillo me dieron algo de gracias- ¿Cómo llegaste aquí? -fruncí el ceño.
-Me toca estar junto a tí -sonreió-. ¿Cómo te llamas?
-Bill ¿y tú?
-Marcella, ¿irás a Cabo Sal Lucas? Que bonito: yo amo los Cabos. ¿Conoces ese lugar? -farfulló.
-No lo sé; y casi no -respondí extrañado.
-Te llevaré a ese lugar y te ayudaré a conocerlo -dijo emocionada.
-Bueeno -añadí aún más extrañado-, Marcella, gracias. ¿Vienen tu sola? -la miré un poco preocupado.
-Sí -dijo simple-: ¿tú también vienes solo?
-Ajam.
-Oh.

Guardo silencio.
Podría haber un noventa y cinco porcieto de probabilidad de que la niña fuera mexicana y no estadounidense. Quién me viera socializando con una niña.
Pero aún no se me olvidaba lo que me hizo Tom.

-¿Eres mexicana o... qué? -inquirí.
-Sí, pero con raíces americanas. Me gusta.
-¿Cómo? No se puede tener raíces de otro país: debemos ser sólo de una nacionalidad -repuse.
-¿Y tú eres americano? -me preguntó.
-Soy alemán, pe.. -hago una pausa. Que idiotez acabo de deicr.
-¿Pero tienes raíces americanas? -completó mi oración- Acabas de contradecirte, Bill: ¿haces esto todo el tiempo? Primero aprende a juzgarte a tí mismo y luego a conocer a las personas: dime que critícas y te diré que careces -me dijo.

"Esta niña tiene la mentalidad de adulto".
Me snerí alho avergonzado por lo que había dicho yo: me contradije. Y ella tenía razón: "primero aprende a juzgarte a tí mismo". Creo que aún no he salido del tiempo donde se encuentran todos los estereotipos absurdos: mis padres me enseñaron a estar con una persona que fuera del mismo nivel económico que yo y juzgar a las personas antes de tiempo.
Llevaré una buena amistad con Marcella: un adulto aprenderá de una niña de escasos diez o once años.

Marcella comenzó a contarme de donde venía, como ha sido su vida y que tal va en el colegio. Es extrovertida.
Su padre que es americano se casó con su madre que es mexicana cuando ellos tenían los veintitrés años: ha sido muy felices hasta ahora. La niña sacó los preciosos ojos verdes grisáceos del papá, y esa tez morena clara de su madre.
En el colegio es de ochos y nueves, y uno que otro diez. Le gusta mucho la historia y el español -yo sólo conosco la historia de Alemania y de Estados Unidos. Las escuelas de México son extrañas-; y detesta Biología.
¿Cómo una niña de once años podía viajar en un avión hacia Baja California Sur, México? Yo con veinticinco años me siento austado y con ganas de matar al imbécil de Tom.

-Son ya las tres con once -le dije.
-Hmm, tengo sueño -arrugó si nariz la niña.
-Duerme un poco: no tengo ni dea de a qué hora llegaremos -admití poco confundido.
-Llegaremos a als cinco -anunció, recostándose del respaldo del asiento.
-Ah, ok. Gracias por la información.

Que situación tan más incómoda: estoy a punto de irme con una niña de once años a una ciudad rara.

* * *

Exactamente habíamos llegado a als cinco de la tarde. No hubo algún percance y dormí un poco. Tuve un sueño bastante extraño: soñé con Afrodita, la diosa romana. Pero no era como realmente se le conoce, sino que lucía bastante diferente. Que extraño.
Al bajar del avión y tomar nuestras maletas, las azafatas se despidieron de mí. Lo único que hice fue mirarlas feo: me chocan las chicas así.
Marcella me incidcó como actuar ante nuestra llegada: me dijo casi las mimas palabras que Tom. Cuando entramos a la central del aereopuerto me sorprendió la cantidad de gente que se encontraba: eran como miles de hormigas. Varias tenían carteles con nombres para encontrarlos.
Un señor buscaba a Marcella.

-Rodrigo: él viene conmjgo -le dijo al señor en un idioma que al parecer era español-. Es un amigo de mamá.
-De acuerdo.

Garraspeo mi garganta. Luego le dijo a Marcella:

-¿Y a dónde iremos?
-A un hotel cinco estrellas -me dijo sonriente-: es uno que te gustará.
-Hmm, ok. ¿Estás segura de esto?
-Sí, ¿o es que no le tienes confianza a esta niña? -me miró tiernamente.
-Hmm, vale, vale. Vallamos.

El señor 'Rodrigo' tomó las dos únicas maletas de Marcella y nos encaminamos a la salida. Nunca había visto semejenate cosas: una variedad de razas se encontraban unidas en un solo lugar.
El camino en la limusina de la niña fue largo. Por un momento me asusté: ya ibamos demasiado lejos de la ciudad o lo que fuera. Marcella le contaba un sin fin de cosas al señor en el idioma que menos supe entender. Reían a veces.
Yo me sentí bicho raro. Después recibí una llamada del vago de Tom:  quedó aliviado al saber que llegué entero a Baja California. ¡Pero no sabía que me iría a otro lugar! Joder.

-Ya casi llegamos, Bill -me avisó Marcella sonriente.
-De acuerdo.

Llevábamos unas cuántas horas. Comencé a  ver muchas luces y edificios. ¿Dónde carajos estabamos? ¡Quería saberlo ya! Espero y Tom haya tomado una buena decisión: el principio de esto no me gustó para nada. Excepto por Marcella.

-Bueno, Bill: bienvenido a Cabo San Lucas -dijo Marcella.

Quedé perplejo.
Esto era mejor que Hawai, mierda.

-¿De verdad? ¡Dios! Que maravilla de ciudad o lo que sea: es mejor que Los Ángeles, Las Vegas, Atlanta, ¡que todo! -exclamé maravilaldo.
-Lo sé: pasaremos unas vacaciones locas.
-Wow, Marcella: esto es impresionante.

Necesitaba conocer este lugar YA. No podía esperar ni un minuto más. Había quedado diotizado por esa ciudad.
Ahora amo a Tom.
Entramos al hotel y Rodigo hizo los trámites por Marcella. Creo que ella es rica porque ya tenía reservada una suite privada. Un chico llevó nuestras maletas a la habitación número quinientos noventa y uno.
Y como siempre, las miradas de todas las chicas que se paseaban por ahí quedaron embobadas por mí. Menuda mierda: las miradas de esas chicas sí me incomodaron. No era lo mismo como en Las Vegas o cuando me paseaba por tierra estadounidense.

-Bueno, espero y te la pases bien: conocerás a fondo esta bella ciudad -me dijo.
-¿Podemos comenzar mañana mismo? -la miré suplicante.
-Está bien, amigo.


¡Holaaaaaaaaaaaa! Espero estéis bien..y eso. ¿Qué tal me quedó? creo que ahora sí me inspiré: ya me imagino a Bill como pollito asustado en el avión. Jajaja.
Ahora, con respecto a donde se vino Bill, para las que son de México seguramente ya conocen Cabos San Lucas; y para las que no, aquí os traigo un leve resumen:

Cabos San Lucas es una ciudad que se encuentra obviamente en México (ay, que tonta xD), y en donde yo vivo se le conoce como el fin del territorio -no me pregunte por qué, así le dicen aquí en mi pueblo._.-. Es el segundo puerto más caro del mundo y uno de los más importantes. Es excelente por su clima entre desértico y tropical.
Tiene demasiadas playas así bien locas, pero las más "importantes" por así decirlo sois: Playa El Médano, Playa del Amor y Playa del Divorcio.
Uf! Y de los antros ni se diga: son buenos :B. Las bebidas que se preparan allá son muuy buenas.

En fin, creo que más o menos así está la cosa. Espero y os haya molado el capítulo.
Cuidaos mucho. ¡Adiós! :-)
PD: aquí unas imágenes de las playas de Cabos San Lucas antes mencionadas:
 
 Playa El Médano












Playa del Amor (se encuentra al final del territorio)










Playa del Divorcio (caracterizado por ser poco favorable para nadar o así)

3 comentarios:

  1. hahahahah ese Bill primero odia a Tom y después lo ama. . . .
    Hahaha me dio risa Bill. . .
    Espero suba pronto
    cuídate y un abrazo :D

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  2. :O ameeeeee el capitulo!!!!!!!!!!!!!! Amo la personalidad que le estas dando a Bill jajajajajajaja, si tambien me lo imagino asustado en el avión e insultando a Tom xD... Te quedo de perlas! Seguire leyendo, gracias x subir.

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  3. oH genial.... me encanto
    te quedo muy bien el cap
    esperare el proximo
    y muchas gracias por leer mis fic's
    cuidate bye

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Gracias por leer*-*